martes, agosto 02, 2005

Mi camisa morada tornasol


(Variaciones etílicas sobre un suceso vacacional en alguna playa mexicana)

No sé por qué me quitaste la camisa esa noche. A lo mejor si tuviera un abdomen que resaltara los cuadros musculares del famoso dibujo antropomórfico de DaVinci podría entenderlo, pero no, estoy un poco (sólo un poco) panzón, tengo un color de piel parecido al papel bond y no tengo ningún detalle físico que tus revistas frívolas califiquen como atractivo.

Cualquiera pensaría que querías cierta dosis de cariños. Sin embargo, están equivocados, porque el hecho de descamisarme te causó muy poco rubor. También he descartado la teoría que sostiene que lo hiciste por jugar, ya que no te burlaste de mi barriga, y sólo sonreíste un poquito, como no queriendo. Después me tomaste una foto (muy mala, por cierto), tiraste la camisa y te fuiste.

Seguramente caerás en la tentación de argumentar que estabas borracha, pero no, no me convencerás con esa gastada excusa. El alcohol provoca que la gente se vuelva, digamos, laxa, pero no provoca que tengamos deseos que antes de la borrachera no teníamos. Todavía espero tu respuesta, porque aparte de que me sorprendiste absolutamente, cuando jalaste la camisa me rasgaste ligeramente mis intimidades (insértese aquí mi cara medio apenada), y créeme que eso bien vale un capítulo adicional en esta historia.

Además de este cuento sobre una camisa sin torso, dijiste que cuando llegáramos a esta cuidad íbamos a vernos. A la fecha, no te he visto ni una sola vez, todavía tengo mi camisa… ¡y tú me debes una explicación!

9 Comments:

Blogger Manelich Castilla Craviotto said...

...y creo que tus lectores necesitamos saber si el acto quedó impune o decidiste aplicar alguna causa de justificación o exclusión del delito.

Salud

8:26 a.m.  
Anonymous Anónimo said...

Mí estimado Horta:

Sinceramente sabes lo que pienso, no es que te quiera agredir con mi comentario, pero creo que en el momento que te quito la camisa tu tenias que quitarle la de ella, sin esperar que se fuera corriendo, siento que este es otro caso mas de lentitud Corona.

Una mujer mas obvia no puede ser y mas a tu favor si estaban borrachos los dos k era solo una aventurilla, tanto así que no las has vuelto a ver y ni la volverás a ver.

ok amigo espero encuentres TU respuesta algún día, si borrar este comentario que joto eres, cuídate.

Portillo

6:14 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Rafa, líbreme Dios de saber lenguaje corporito o Klingon, pero creo que le llaman "Closing". Closer es una película de Natalie Portman y Jude Law. También salen el Rey Arturo y Julia Roberts. Y todos se la pasan MMMuy bien.

7:53 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Pues yo quiero saber que paso con la niña que fue provocada por la camisa morada tornasol!! De verdad que no entiendo que paso!! Ya dinos que hiciste!! Algo tuviste que haber hecho!!

8:48 a.m.  
Anonymous Anónimo said...

Yo contestaré lo que paso por la mente de la señorita:

Primero: Se sintió atraída por el color de la camisa (sólo un hombre muy hombre hubiese podido portar con dignidad un color de esos).
Segundo: Sintió curiosidad, mucha curiosidad.
Tercer y último punto: La variación etílica solo fue el pretexto para echarte el can gruex-so, cosa que por lo visto tú no comprendiste del todo gracias a tu variación mega etílica.

Para terminar te diré lo que pasó por mi mente cuando leí tu anécdota:

Primero: Los panzones, son atractivos, hasta ahí no hay nada malo.
Segundo: Los blancos no son mi tipo, pero blancos, con panza, bueno no mucha, es aceptable.
Tercero: La señorita, no quería cariño, quería algo más.
Cuarto: La señorita no estaba briaga, solo tenía algunas encima, por aquello de la enjundia.
Quinto y último punto: No creo en absoluto que no haya pasado nada.

“Al compás de tu abdomen aventurero, víctima de la gravedad” (toing).

P.D. No esperes que te busque, sólo encuéntrala y dale su merecido. ; ) (pillin).


(> <) Un
"
o ,) Fuerte
( ( )
?.? Abrazo.

1:34 p.m.  
Blogger Plaqueta said...

Pinchis viejas que andan aái quitándole las camisas a los hombres pa' fotografiarlos e irse. Eso no es de dios.

Yo apruebo a los pálidos panzones porque yo soy una pálida panzona maiself.

8:08 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

De acuerdo "Plaqueta" los panzones blancos (no todos) son muy buenotes, pero que tal uno apiñonado ;)

Te invito a que pruebes uno de buen cuerpo blanco, se ven y saben mejor.

En cuanto al blogero no tiene nada de malo tu físico, se ve que eres muy buen tipo y confesar esas cosas es solo de valientes.

Ojala me encontrara con alguien como tu, así que mientras no te conozco me mantendre en el anonimato.

Un abrazo cálido para ti solito.

Pd. Yo si me pondría tu camisa.

3:43 p.m.  
Blogger Luis Fernando said...

Hay comentarios que merecen el anonimato (o incluso, una sanción un poco más adecuada, como la muerte civil), pero hay otros, como el de acá arriba, que, por el amor de Dios, merecen nombre y apellido, o al menos, un nickname que me permita...

4:09 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Qué frustración... No se vale dejar las cosas así (ni para ti, ni para los que te leemos)! Y ya tomaste la revancha? No creo que seas de los que se esperan a que una lo haga todo, ¿verdad? Saludos

4:04 p.m.  

Publicar un comentario

<< Home